
Efectos de las enfermedades intercurrentes sobre las necesidades de insulina
- Fiebre
- Tiende a incrementar la glucemia debido a las hormonas contrarreguladoras.
- Aumento de la resistencia a la insulina.
- Aumento de la glucogenolisis y de la gluconeogénesis: riesgo incrementado de cetoacidosis
- Falta de apetito
- Disminución de la ingesta de hidratos de carbono.
- Presencia de vómitos y diarrea
- Disminución de necesidades de insulina.
- Estrés de la enfermedad
- Aumento de hormonas contrarreguladoras: incremento de necesidades de insulina (salvo en niños < 6 años).
- Utilización de fármacos hiperglucemiantes (corticoides)
- Tiende a incrementar la glucemia debido a las hormonas contrarreguladoras.
¿Consecuencias de las enfermedades intercurrentes en la diabetes?
- Deshidratación.
- Hiperglucemia descontrolada o sintomática.
- Cetoacidosis.
- Hipoglucemia
Cosas a tener en cuenta:
- Las enfermedades intercurrentes pueden causar hiperglucemia y cetosis.
- Pueden dar lugar a hipoglucemia, más frecuentemente en niños menores de 6 años (por inmadurez de los sistemas de contrarregulación).
- Si un niño con diabetes vomita siempre hay que considerar posibilidad de deficiencia insulínica mientras no se demuestre lo contrario.
- La glucosa en sangre y los cuerpos cetónicos en orina (cetonuria) o mejor en sangre (cetonemia) se han de monitorizar con frecuencia mientras dure la enfermedad.
- Hay que ajustar la dosis de insulina, nunca omitirla, incluso si el paciente no puede comer.
- No hay que olvidar el tratamiento de la enfermedad intercurrente.
- Aumentar la ingesta de líquidos, especialmente si la glucosa en sangre es alta, hay presencia de cuerpos cetónicos o existen pérdidas de líquidos por diarrea, vómitos o fiebre.
- Se han de administrar bolos adicionales correctores de insulina de acción rápida en una cantidad igual o superior al 10-20% del total de la dosis diaria, cada 2-4 horas si la glucosa en sangre es alta y hay presencia de cuerpos cetónicos.
- En niños con náuseas y vómitos pueden ser útiles los líquidos azucarados en pequeñas cantidades, siempre que se haya administrado insulina y la hiperglucemia no sea excesivamente elevada.
- Se ha de acudir al servicio de urgencia médica si, tras los bolos extra de insulina, la glucemia y/o los cuerpos cetónicos permanecen igual de altos o con tendencia ascendente.