Compartimos con vosotros esta entrevista a Dani Albero, piloto del Dakar y ponente en la I Jornada «Avances y tecnologías aplicadas al tratamiento de la diabetes», realizada por nuestros compañeros de la Asociación Valenciana de Diabetes.
En esta I Jornada «Avances y tecnologías aplicadas al tratamiento de la diabetes» podrás informarte de los últimos avances relacionados con la diabetes. Haciendo clic en este enlace podrás conocer el programa completo e inscribirte.
La intervención de Dani Albero será muy interesante, ya que nos hablará de su experiencia como piloto del Dakar con diabetes.
El piloto Dani Albero primero en participar en el Dakar con Diabetes Mellitus tipo 1, estuvo en el colegio público Alborxi de la localidad valenciana de Alzira hablando de su reto a los alumnos y nos anunció su vertiente social de apoyo a nuestros «dulces».
Dani y su motocicleta provocaron máxima expectación entre los estudiantes pero sobre todo la ayuda a las personas con diabetes y su solidaridad son un claro ejemplo de superación.
Con esta participación en el rally más popular, emocionante y exigente del mundo, Dani Albero se tiene que convertir en estímulo y ejemplo para tantas personas con diabetes.
P.-Venir y ponerse delante de cien niños y niñas, hablarles de ti mismo y de tus proyectos… no tiene nada que ver con conducir la moto y ponerse a entrenar, o competir, Dani. ¿Con qué sensaciones te enfrentas a situaciones como la de esta mañana?
R.- No tiene nada que ver una cosa con la otra, por supuesto. Pero disfruto compitiendo y disfruto hablando con la gente. Hemos ido aprendiendo poco a poco y ya puedo decir que me encuentro cómodo ofreciendo charlas como la de hoy. Para mí es importante ir a colegios, instituciones médicas, incluso a empresas, a hablar de la diabetes y de mis retos. Fíjate que cuando me reciben directivos de empresas a las que solicitamos financiación, antes me gusta explicarles qué es la diabetes y qué supone vivir con ella, en mi caso, desde los diez años. Y creo que reciben con agrado y curiosidad esta información, novedosa para muchos de ellos. Es necesario para que se entienda qué nos empuja a seguir adelante cada día con nuestro propósito de que por primera vez haya una persona con diabetes en el Dakar, el mejor rally del mundo.
P.- En este Colegio ya tienes parte del recorrido hecho, porque en toda esta semana no se ha hablado de otra cosa más que de tu visita. Los niños y las niñas recordarán esta mañana durante mucho tiempo y quizás algo en ellos cambie para siempre, gracias a lo que han visto o escuchado. No es por ponerte bajo presión, pero eres consciente de ello, ¿no?
R.- ¡Claro que lo soy! Y es lo que más me llena de estos encuentros: la posibilidad de poder contribuir a entender entre todos, pacientes y no pacientes, qué es vivir con diabetes. Y qué mejor que dirigirme a los más pequeños, con su receptividad y con su facilidad para aceptar a quienes son distintos por cualquier motivo. Vivir con diabetes es ahora infinitamente más fácil que antes, pero aún hemos de seguir peleando diariamente contra falsas creencias, injusticias administrativas, comentarios inadecuados, etc. Y para mí es importante aportar información y experiencia personal para ir combatiendo todo ello. Independientemente de la participación en el Dakar, todas estas experiencias seguro que no caen en saco roto. Son encuentros que me enriquecen como persona y espero que un poco también a quienes me escuchan.
P.- Está claro que no has dejado a nadie indiferente, Dani. Los chavales parecieron muy atentos a tu charla. ¿De qué modo crees que tu visita al colegio puede cambiarles su idea sobre qué es tener diabetes?
R.- Uf, ante todo, mi propósito no es dulcificar una condición que no es otra cosa que una enfermedad, ni simplificar una realidad tan compleja como la que vivimos los tipo 1. Tampoco vengo a soltar rollos ni a pronunciar discursos de motivación. Lo que sí me gustaría es que, después de lo de hoy se quedaran con la idea de que es prioritario conocer la enfermedad, conocerse a sí mismo muy bien y, a partir de ahí, que cada uno se proponga llegar en la vida tan lejos como se piense que puede llegar. Y si yo puedo ser un ejemplo de esto mismo que estoy diciendo, diré aquello de “misión cumplida”. Ahí tenemos otros ejemplos como el de Nacho, el futbolista del Real Madrid, o iniciativas como la del equipo ciclista Novo Nordisk, de productos para la diabetes.
LA EXPERIENCIA DE DANI EN LOS CAMPAMENTOS Y SU SOLIDARIDAD
Cuando Dani Albero recuerda sus campamentos de verano de infancia, sus sentimientos son contradictorios. Y cualquiera que conozca la historia de su vida entenderá por qué. Un viernes del verano de 1980, tuvieron que llevárselo en ambulancia del campamento donde pasaba unos días de diversión. Unas fiebres altísimas fueron el preámbulo de un diagnóstico atroz: meningitis aguda. Veinte días bordeando el abismo y un año entero de convalecencia. Después de aquel período, la vida de Dani recobró la normalidad hasta que meses más tarde, en la Navidad de 1982, tras perder ocho kilos de peso en pocos días, los análisis a los que se sometió arrojaron otro terrible diagnóstico: Diabetes Mellitus tipo 1. Pasada la tormenta del debut y una vez sus padres recuperaron la normalidad necesaria para reenfocar la vida familiar, tomaron una feliz decisión: Dani iría de nuevo de campamento ese verano, un campamento organizado para niños con diabetes. Allí encontró respuestas, compartió alegrías y sustos, y sobre todo, dio un importante paso en el control de su propia vida y en eso de ver claro cuáles son los límites y las metas que cada uno se tiene que plantear. De nuevo, un campamento de verano supuso un momento clave en su vida. En este punto Dani nos anunció una ilusionante iniciativa manifestando lo siguiente:
“Para un “dulce” es importante saber que no está solo con su diabetes, que sus amigos entienden qué le pasa y por qué tiene que controlar su alimentación, hacer ejercicio y ponerse insulina. Pero también debe de ser necesario conocer a otros “dulces” a los que les pasa lo mismo. A mí me cambió la visión que tenía de mi diabetes los días que pasé con diez años en el campamento al que me apuntaron mis padres. Fue fantástico e inolvidable, una experiencia muy recomendable. Ojalá todos los pequeños “mellitus” puedan vivir algo parecido. Por eso voy a aprovechar la ocasión para anunciar un proyecto, que es también una ilusión: una vez conseguidos los fondos necesarios para nuestro proyecto en el Dakar, la cantidad sobrante la destinaremos a promover la creación de un campamento de verano para niños y niñas con diabetes. Se trata de una decisión consensuada con todo mi equipo, de la que estamos ya perfilando los detalles”.
Deseemos toda la suerte del mundo al piloto valenciano y su equipo, para ellos mismos y, cómo no, para los futuros participantes en el ansiado campamento de verano destinados a nuestros “dulces”.
Puedes seguir a Dani en:
https://www.facebook.com/people/Dani-Albero-Puig/100008169582419
Artículo e imágenes cedidas por la Asociación Valenciana de Diabetes publicadas en su revista nº 29.
¡Gracias Dani, gracias Héctor!