El sistema de monitorización de glucosa podrá ser indicado por los médicos implicados en el diagnóstico y tratamiento de la DM2 en el Sistema Nacional de Salud, como alternativa a las tiras reactivas de glucemia, para pacientes diagnosticados de diabetes mellitus tipo 2 que realicen terapia intensiva con insulina (múltiples dosis diarias o con bomba de insulina), y requieran realizar al menos seis punciones digitales al día para la auto-monitorización de la glucosa en sangre.
La implementación de este acuerdo se realizará de forma progresiva entre 2022 y 2024, y atenderá a los criterios acordados por la Comisión de Prestaciones, Aseguramiento Financiación (CPAF) del Ministerio de Sanidad, a propuesta del grupo de expertos. Estos criterios serán acordados en un plazo máximo de 6 meses desde la publicación de esta Resolución. Esto supone que todos los pacientes que cumplan los requisitos podrán acceder a estos dispositivos antes del 31 de diciembre de 2024.
Los usuarios, además, antes de comenzar a usar el dispositivo, deberán recibir una formación estandarizada.